La propietaria se retiró de su hogar a las 18:30 horas para realizar algunas compras. Al regresar aproximadamente 20 o 25 minutos más tarde, descubrió signos de intrusión en su propiedad. La reja frontal había sido forzada y el interior de la vivienda había sido violentado.
Según la víctima, se constató la sustracción de un televisor de 43 pulgadas, una garrafa de 10 kg, sábanas y otros artículos de valor. Tras el arribo de las autoridades, se llevaron a cabo investigaciones de rigor.
La División correspondiente ha iniciado una investigación oficial con el propósito de esclarecer este lamentable suceso.