La jornada comenzó a las 8 con el tradicional izamiento del Pabellón Nacional en el mástil de plaza Ramírez y posteriormente la comitiva se trasladó hasta el busto que recuerda a Manuel Belgrano en la misma plaza, sobre 25 de Mayo y Galarza, donde se leyó una breve reseña en su memoria y se depositaron ofrendas florales, seguido de un minuto de silencio. El momento contó con la presencia del intendente Martín Oliva, concejalas, concejales, integrantes del Departamento Ejecutivo municipal, autoridades educativas, de las fuerzas armadas y de seguridad y público presente que se acercó a presenciar el momento.
Posteriormente, la sociedad uruguayense se concentró en Plaza Ramírez donde se llevó a cabo el acto central, dando inicio a las 10.40 con la participación de más de mil alumnas y alumnos, entre banderas de ceremonias, niñas y niños de los cuartos grados que realizaron su promesa de Lealtad a la Bandera, la que pudo concretarse luego de dos años de pandemia. La fórmula fue leída por la Directora Departamental de Educación, profesora Ana María Díaz, quien estuvo acompañada por el Presidente municipal, supervisoras y supervisores de nivel primario.
También, los soldados del Ejército Argentino, veteranos de guerra, ex soldados, y bomberos voluntarios, procedieron a realizar la Jura de Fidelidad a la Bandera Argentina ante el Teniente Coronel Pablo Roberto Lara, Jefe del Batallón de Ingenieros Blindados 2.
Luego de la revista de tropas, el Presidente Municipal Martín Oliva, saludó a las delegaciones que realizaron la promesa a la Bandera, siendo recibido por las y los estudiantes con banderitas argentinas que bien en alto, fueron enarboladas con orgullo en tan significado momento.
Palabras alusivas
La primera persona en hablar, fue la alumna Martina Segura, de 6° grado de la Escuela N°76 San Vicente de Paul, que entre otras cosas remarcó: “El día de hoy recordamos a una gran persona, que entendió lo que tenía que hacer para lograr una Nación justa, igualitaria y libre. Una persona que con sus defectos y virtudes inspiró e inspira en la actualidad a que continúen con su misión.
El día de hoy pasará a la historia de los estudiantes, que por primera vez, responderán a la pregunta fundamental de la identidad de los argentinos, prometerán ser fieles, leales a los valores que fundaron nuestra Nación, su lucha ya no será, una luchar armada por la libertad, pero será una lucha cotidiana con solidaridad, servicio y entrega para vivir como verdaderos argentinos, para que el sueño que los padres nuestra Patria tuvieron, sea una realidad…”.
Por su parte, el coordinador de Control Presupuestario de la Municipalidad, Cr. Fernando Picart, se dirigió a los presentes destacando: “La primera vez que nuestra bandera flameó para darnos identidad fue el 27 de febrero de 1812 a orillas del río Paraná. El General Manuel Belgrano entendió antes que nadie, la necesidad de crear identificación y pertenencia. Un símbolo. Algo que nos uniera en esa lucha por la libertad y la independencia en los turbulentos tiempos posteriores a la revolución de Mayo.
Mucho se ha escrito y especulado sobre los colores elegidos. ¿Acaso ese celeste y blanco fue tomado como inspiración por el cielo a orillas de las barrancas?, ¿O tal vez Belgrano tomó la idea de los vestidos de la Virgen de la Inmaculada Concepción, tradicionalmente albicelestes? ¿O fue un guiño a los Borbones, identificados con esos colores, para sostener la soberanía de estas tierras de la Corona Española? Muchas preguntas, pocas certezas, pero una realidad irrefutable: aquella primera vez que fue izada la Bandera Nacional Argentina se convertiría luego en un hito histórico. Y ese símbolo patrio se transformaría con el correr del tiempo en el ícono más importante e identificativo de nuestra tierra.
Pero no podemos rendir homenaje a nuestra bandera, sin reconocer a Manuel Belgrano. Abogado, economista, periodista, ecologista, político y militar, Belgrano fue mucho más que el inspirado creador de la bandera. Fue una de las figuras fundamentales del proceso que condujo a la independencia del país.
Esas telas celestes y blancas se transformaron en un símbolo de identidad nacional, de un sueño compartido, mientras el mismo Belgrano lideraba las batallas de Tucumán y Salta para consolidar la independencia con sus victorias. Pero Belgrano fue ante todo un intelectual de intachable integridad y firmes convicciones patrióticas, un trabajador desinteresado e infatigable al servicio de esa patria incipiente, de la educación de sus habitantes y un adelantado en ideas económicas.
Con un pensamiento sabio, muy avanzado para la época y de una actualidad que asombra y admira, Manuel Belgrano se nos fue un 20 de junio de 1820 en medio de la indiferencia general, mientras en plena guerra civil Buenos Aires tenía tres gobernadores en un mismo día. Aquel Belgrano alcanzó a decir en ese contexto político: ‘Yo espero que los buenos ciudadanos de esta tierra trabajarán para remediar sus desgracias’ ”.
