El futbolista de Boca Juniors Sebastián Villa aseguró este lunes ser inocente al declarar en el juicio que le sigue como acusado de haber ejercico violencia de género contra su expareja Daniela Cortés en abril de 2020 en una vivienda de un barrio privado de la localidad bonaerense de Canning, y dijo era ella quien lo «arañaba» y «golpeaba».
«El hecho que se me ha imputado nunca lo cometí», dijo el delantero «xeneixe», al iniciar este mediodía su declaración ante la jueza Claudia Dávalos, a cargo del Juzgado Correccional 2 de Lomas de Zamora, que lo juzga por «lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género y amenazas coactivas» a su expareja Daniela Cortés.
Minutos antes de las 12, Villa se levantó de su asiento y por única vez en el día esbozó una sonrisa al responderle a la jueza que quería declarar.
Luego de acomodarse frente al estrado, vestido con un buzo canguro negro y pantalón blanco con zapatillas del mismo tono, Villa dijo sus primeras palabras en el juicio que se le sigue desde el 17 de abril último y apuntó contra su expareja, también colombiana, de quien dijo que «era muy celosa» y «manipuladora».
El futbolista, que ayer participó de la derrota de su equipo frente a River en el superclásico que se disputó en el Estadio Monumental, afirmó que «estaba enamorado» de ella y que la conoció en 2018 cuando él era jugador del Tolima de Colombia, previo a su pase al equipo argentino.
No obstante, al hablar del vínculo y las agresiones, dijo que quien era víctima de violencia era él: «Me arañaba; yo usaba manga larga por vergüenza para que mis compañeros no vieran que me golpeaban en casa».
El futbolista, que en la audiencia de hoy estuvo acompañado por familiares y un amigo, recordó que, cuando fue comprado por el club de La Ribera, empezó a convivir con Cortés en un departamento de Puerto Madero, aunque ella regresaba cada dos o tres meses a Colombia para estudiar y estar con su hija.
En un tramo de su declaración, Villa hizo referencia al momento en el que cobró un porcentaje del pase, unos 400 mil dólares, con los que compró departamentos en Medellín que escrituró a nombre de la hermana de Cortés, llamada Sabrina.
«Ella siempre quería tener el control de todo. Una noche se fue para Colombia porque se enojó porque no le firmé que fuera la dueña de un departamento», sostuvo Villa.
En ese marco, afirmó haber sido él quien sufrió hechos de violencia por parte de Cortés, a quien acusó de sustraerle una suma de dinero con la que iba a comprar un auto marca Audi.
Fuente: Télam