El Servicio Meteorológico Nacional ratificó este viernes a la madrugada la alerta amarilla por tormentas que abarca al centro y norte de Entre Ríos, junto con el noreste de Santa Fe y gran parte de Corrientes.
La advertencia, que incluye a Paraná da cuenta de que este fenómeno podría afectar la zona mencionada en horas de la mañana e incluso extenderse hasta la tarde de este viernes.
Sociedad Emitieron alerta por tormenta y posible caída de granizo en parte de Entre Ríos
El informe señala que “el área será afectada por tormentas de variada intensidad, pudiendo ser algunas localmente fuertes”.
Se esperan “valores de precipitación acumulada entre los 15 y 30 milímetros, pudiendo ser superados localmente”.
También es posible que se registren “ráfagas fuertes, caída de granizo e intensa actividad eléctrica”.
El pronóstico para hoy y el fin de semana
Para hoy en Entre Ríos se pronostica nublado e inestable, con probables lluvias y algunas tormentas aisladas. Fresco por sensación térmica.
Hacia la tarde vientos rotando a moderados del sudeste, con probables lluvias y tormentas dispersas. “Algunas de ellas podrían generar granizadas”, alertó el informe de Defensa Civil de Entre Ríos.
“Es probable que por la noche las condiciones de inestabilidad se mantengan pero disminuyan su intensidad”, aunque se esperan vientos “moderados con ráfagas superiores del sudeste, rotando al sur”.
Atención: probabilidad de granizo
“La inestabilidad terminaría de ingresar a nuestra provincia durante la madrugada del sábado, con viento rotando al sur o sudeste, con ráfagas”, señaló el jueves en Elonce el meteorólogo Alejandro Gómez.
Enseguida alertó sobre “condiciones de inestabilidad significativas con lluvias y tormentas, algunas de las cuales podrían ser importantes y un núcleo de aire frío que favorecería las condiciones de probables granizadas en una zona bastante amplia de la provincia”.
No obstante, el especialista trazó una comparación con lo sucedido el lunes, sobre todo en Viale, y estimó que el fenómeno no alcanzaría tal magnitud.
Es que “arrancaríamos de temperaturas que no son tan altas en niveles superficiales. El fin de semana pasado tuvimos 26 o 27 grados, mientras que en este caso las máximas serían 16 a 17 grados”, por lo que “la disponibilidad de energía térmica no es significativa”, explicó.











