Esta mañana se incautaron 9288 botellas de vino de primera marca que intentaban salir del país por distintas fronteras terrestres y sin contar con la documentación correspondiente.
El cargamento estaba valuado 84 millones de pesos y se sumó a otra incautación de vinos. En este caso eran botellas que no pudieron ingresar, provenientes de Chile, sin documentación y por un total de casi 3 millones de pesos.
Las botellas son todas de primeras marcas y de bodegas boutique en nuestro país: El Gran Enemigo, Catena Zapata, Familia Millán y Rutini, entre otras. También incautó vinos chilenos valuados en $2.9 millones que habían ingresado por la vía del contrabando a la Argentina: Monte Alpha M, Purple Angel, entre otras.
La Dirección General de Aduanas constató que, desde la ciudad de Posadas, firmas de envío de encomiendas pretendían colocar una exorbitante cantidad de botellas de primeras marcas en localidades ubicadas sobre la frontera noreste de nuestro país sin documentación suficiente para respaldar la maniobra. Además, por su precio y cantidad, la mercadería no se correspondía con el nivel de consumo propio de esos lugares.
Concretamente, la Dirección General de Aduanas interdictó 1.130 cajas de 6 vinos cada una, cuyo precio por botella ronda los 7 mil pesos; 350 cajas de 4 vinos, con un precio por botella de 11,5 mil pesos y, finalmente, 960 botellas con un valor unitario en torno a los 18,5 mil pesos. Asimismo, también incautó 148 botellas de vino chileno, con un valor de 20 mil pesos por unidad, cuyo legítimo ingreso al territorio nacional no pudo ser demostrado, por lo cual se entiende que fueron importadas a la Argentina por la vía del contrabando.
Fuente: Perfil/El Once