Una chofer de ambulancia protagonizó un emocionante traslado médico: llevó a su propia hija desde el hospital de San Salvador al de Concordia para que diera a luz a su nietita. “Se me juntaron las emociones porque no sabía si ir como abuela o como chofer de la ambulancia, pero con la cabeza en frío, llevé a mi hija a tener a mi nieta”, aseguró Roxana Barreto a Elonce.
Barreto, quien desde hace tres años es ambulanciera suplente en el Hospital San Miguel de San Salvador, este jueves se encontraba de guardia pasiva cuando le tocó hacer un viaje más que especial, su hija mayor debía ser traslada al Masvernat de Concordia para dar a luz.
“Cuando regresé de un traslado, mi hija esperaba a que la atienda la doctora para un control; volví a casa y, al ratito, me llamó una de las enfermeras para avisarme que la habían internado en observación. Al llegar, ella fue controlada por los médicos y luego ordenaron el traslado a Concordia para un mayor control”, rememoró la chofer de ambulancia en diálogo con Elonce. Para Roxana, el traslado representó “una emoción muy grande”.
“Se me juntaron las emociones porque no sabía si ir como abuela o como chofer de la ambulancia, pero con la cabeza en frío, llevé a mi hija a tener a mi nieta”, aseguró la ambulanciera, que además es madre de cinco hijos. Finalmente, Martina nació el 6 de febrero a las 21.35 y pesó 3.200 kilos.