La uruguayense Ana Lis Pitter, participante del reality Supervivencia al desnudo Latinomérica donde los concursantes deben sobrevivir 21 días sin comida, agua ni ropa, en la selva, dialogó sobre su experiencia en el programa Rompiendo el Hielo emitido por el canal de streaming Mavi TV.
Pitter, que se dedica a la micropigmentación y dirige el centro Beauty and Go, señaló que se trata del reality «más real que existe porque no hay ningún tipo de intervención» y resaltó que a partir de su participación se siente feliz de haber representado a Entre Ríos y a Concepción del Uruguay.
La uruguayense recordó cómo fue convocada a participar en el programa emitido por la plataforma Max y grabado en 2022. «Todo empezó en la Isla del Puerto, mientras tomaba sol y unos mates con mi mamá. Mi hermana manda la nota de un diario nacional que decía que estaba abierto el casting y había una dirección de mail. Tenía que mandar un video de presentación», recordó.
Y precisó: «Yo me había metido al agua, estaba en malla y con el pelo mojado pero me filmé igual. Lo mandé, puse «hola soy Ana Lis, me encantaría participar, conozco el programa hace 10 años, soy fan». Eso también me motivó porque ya conocía y me gusta mucho la pesca, la naturaleza, la aventura, ya conocía de qué se trataba».
Además, sostuvo: «Mandé el video sin pensar que alguien lo fuera a ver. Lo mandé y me olvidé y a los 15 días me llegó un mail pidiéndome más datos. Fue un proceso de cuatro meses. Me mandaron un cuestionario de 80 preguntas y las contesté sin pensar que podía llegar a ser seleccionada. Tuve que mandar muchos videos haciendo un refugio, cortando leña con elementos de la naturaleza. Cuando empieza el programa dice que participarán «10 expertos en supervivencia» y por eso durante el casting te hacen demostrar habilidades como nadar con ropa y peso en un río, filtrar agua, hacer fuego por fricción o chispero».

El rodaje
El reality se filmó en la selva chaqueña y al respecto Pitter contó: «Tuvimos suerte de que el programa empezara a rodarse cuando habían pasado 3 o 4 días sin lluvia, porque con la yesca mojada o húmeda es muy difícil prender fuego. Esa misma noche llovió y la leña estaba mojada. El fuego es fundamental, te da calor, humo para los insectos, podés cocinar».
«El programa es transformador en sí. Nadie entra y sale siendo la misma persona. El desafío en sí hizo que todo lo de afuera sea un lujo. Estamos acostumbrados a agradecer el techo, la cama, la comida, estar vestidos, tener agua potable a menos de 15 metros todo el tiempo», enfatizó.
Sobre la experiencia de estar sin ropa, señaló que «lo peor de estar desnudo es estar descalzo porque el campo estaba lleno de espinas». Asimismo, aseveró que durante los 21 días encontró que «las arañas son muy ricas» y destacó que superó el miedo que les tenía. «Tienen gusto a la piel del pollo asado», comparó.
«Extrañé mucho a mis hijos, los pensaba mucho y quería dejarles un ejemplo de no rendirse y extrañé el contacto físico con ellos», manifestó Pitter.
.REDACCIÓN LA PIRÁMIDE