Máximo ha estado enfrentando serios problemas de salud desde muy joven. Su patología de base, el síndrome nefrótico corticorresistente, ha llevado a una insuficiencia renal crónica y a complicaciones cardíacas. Desde hace tres años, recibe diálisis peritoneal, un tratamiento que le ha permitido sobrevivir, pero que no puede reemplazar la necesidad urgente de un trasplante.
A pesar de haber estado en lista de espera durante dos años y medio, la situación de Máximo se ha vuelto crítica. Su familia y amigos están haciendo un llamado a la comunidad para que se unan en la difusión de su historia. Cada «Me gusta», cada seguimiento y cada compartido en redes sociales puede marcar la diferencia en la vida de este niño.
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La comunidad puede ayudar a que la voz de Máximo llegue a quienes pueden hacer algo al respecto. Juntos, podemos generar la presión necesaria para que su caso sea considerado en EMERGENCIA NACIONAL.
