Una semana después de ser descubierto intentando pasar más de 200 mil dólares no declarados por la frontera con Paraguay, el senador entrerriano, Edgardo Kueider, fue expulsado del Senado.
Fue con 60 votos a favor, 6 en contra y una abstención: un escenario de casi unanimidad habilitado por el acompañamiento de último momento de la UCR y parte del PRO al pedido de expulsión del peronismo.
El oficialismo, después de hacer todo lo posible para evitar la destitución de su ex aliado, terminó plegándose a la mayoría, temeroso de quedar expuesto defendiendo en soledad a Kueider.
La maniobra de LLA para poner en duda la sesión
El bloque de La Libertad Avanza (LLA) en el Senado salió a poner en duda la legalidad de la sesión en la que se expulsó al entrerriano Edgardo Kueider, ya que aseguran que la vicepresidenta Victoria Villarruel encabezó la discusión en momentos en que debería haber estado al frente del Poder Ejecutivo por el viaje del mandatario Javier Milei.
«Yo creo que un escribano debió haberse constituido en la cámara y hacerle firmar. Son cuestiones jurídicas elementales. Tranquilamente podría darse la impugnación de la sesión. Tendría que haberse hecho un acta de traspaso de mando y firmar la vicepresidenta. Ni bien se firma el acta, cumple otras funciones. Ahora, tendrán que dilucidar quién tiene la responsabilidad», resaltó el senador oficialista Carlos Pagotto.
El libertario abrió la discusión sobre la legalidad de la sesión con el argumento de que cuando Milei está de viaje, Villarruel debe tomar el Ejecutivo y no puede presidir sesiones, tal como hizo esta jornada.
Según afirman desde la oficina de la vice, el escribano que hace el traspaso del mando y lo plasma en un acta llegó al Senado a las 19, cuando la sesión ya había concluido. De acuerdo a lo que informó el vocero presidencial Manuel Adorni, Milei había partido rumbo a Italia en horas del mediodía.
Desde Casa Rosada, dicen que Villarruel fue notificada
El Gobierno dejó trascender a medios afines que la vicepresidenta Victoria Villarruel había sido notificada la mañana del martes que Javier Milei iba a viajar desde el mediodía del jueves hacia Roma. Algunos legisladores del oficialismo plantearon que por ese viaje, la vice debía hacerse cargo del Ejecutivo y no podía presidir la sesión del Senado en la que fue expulsado Edgardo Kueider.
Según los documentos que se difundieron, la notificación fue recibida por la secretaria personal de Villarruel, Guadalupe Jones. “Informo a usted que, el día 12 de diciembre de 2024 a las 12:00 horas aproximadamente, el señor Presidente de la Nación, viajará a la ciudad de Roma (República Italiana), teniendo previsto su regreso el día 15 de diciembre de 2024 a las 20:00 horas aproximadamente”, dice el texto del archivo enviado por WhatsApp.
Desde el entorno de la vice habían informado que el escribano, que hace el traspaso del mando y lo plasma en un acta, llegó al Senado a las 19 del jueves, cuando la sesión ya había concluido. Afirmaron que antes no hubo comunicación previa con el escribano ni con Casa Rosada sobre el viaje.
«En este gobierno no se miente. Que tengan todos un gran cierre de semana. Fin», tuiteó, en modo misterioso, el vocero presidencial Manuel Adorni.
Otro camino
La cuestión es importante porque, al estar Villarruel con las dos funciones a la vez, Kueider podría tratar de judicializar la sesión que lo dejó afuera del Senado y sin sueldo. Algunas voces de La Libertad Avanza (LLA) también se entusiasmaban con un debate que podría quedar nulo.
De momento, lo que se resolvió es que Kueider parta y que lo reemplace la camporista Stefanía Cora. En un primer momento, el kirchnerismo impulsó esto y después se sumaron adhesiones.
Fue clave que antes de que iniciara la discusión llegara una orden de la jueza federal Sandra Arroyo Salgado, quien pidió el desafuero para la “inmediata detención” del senador, en una causa que lo investiga en la Argentina, más allá de lo que pasó en Paraguay. Asimismo, también en el expediente que tramita acá, la magistrada dispuso que se aprese a Iara Guinsel Costa, la mujer que fue arrestada junto a Kueider en aquel país y que sería la secretaria. Además, para ella pidió una orden de captura internacional a Interpol.
Recurso de Kueider
En el Senado insisten en que la sesión no puede ser impugnada y destacan que Kueider tendría más chances de boicotear la sesión si sus abogados alegaran que no pudo defenderse, porque no estuvo presente.
Tampoco disimulan su indignación y destacan que las comunicaciones con la Casa Rosada nunca se interrumpieron durante la votación.
Desde la Casa de Gobierno precisamente llegó la orden que ejecutó el jefe de bloque Ezequiel Atauche para acompañar la expulsión del senador por Entre Ríos, un aliado clave del Gobierno hasta que quedó preso en Paraguay por ingresar ilegalmente US$ 200 mil. (El Once con información de Clarín, Página 12 y La Nación)