El abogado Cristian Panceri, que asiste a Julio Lodi, propietario del campo donde Enrique Fabiani fue visto por última vez en la noche del 4 de junio y de quien hasta ahora no se tienen certezas sobre su paradero, indicó que espera los resultados de las pericias que se están realizando sobre las armas que tenía su asistido y de los celulares de este y su esposa. También adunó tres hipótesis del hecho.
En una entrevistas al programa Simplemente Inocente, Panceri sostuvo que Lodi “fue la última persona en ver con vida al señor Enrique Fabiani; en un primer momento hubo una primera sospecha respecto de mi representado, de que entendió “fue aclarada a través de su testimonial y un careo entre el hijo del señor Enrique Fabiani y mi representado, en el cual se sacaron y se despejaron algunas dudas”.
Panceri realizó una aclaración “pequeña” para “aclarar que esa noche mi representado salió a las 12 de la noche alumbrando hacia el señor donde estaban los perros pero sin armas y posteriormente cuando le preguntaron a ver si tenía arma, sí tenía arma pero la tenía guardadas, por eso las mismas armas las ofrecimos nosotros para que sean peritadas y que muestren que no han sido disparadas por hace bastante tiempo”. Respecto de los informes precisó que aún no se conocen los resultados, añadiendo que “van a demorar un tiempo, para que las perite y ver que no fueron disparadas”.
El defensor viene sosteniendo que su defendido “invitó a Fabiani a retirarse de su propiedad y no lo vio nunca más”, añadiendo que “después de ese encuentro casual no lo vio nunca más, lo retiró a viva voz, con tono autoritario hace que se retire de su propiedad. Porque el señor Fabiani cuando llega al campo lo abordan los perros ladrándole, a las 12 de la noche, 12:30 de la noche y se encuentra con que hay una persona” que a la pregunta sobre qué hacía en su propiedad, Fabiani responde casando a enseguida a voz viva y fuerte le responde mi representado que este un campo privado que está prohibido cazar que se retire a lo que el señor Fabi le respondió que cansado y pide disculpas. Ante esto, señaló que Lodi “le marca con la linterna el camino vecinal que estará a 200 metros, lo ve salir de la tranquera”.
Panceri sostuvo que su representado “no se acuerda” del lugar por donde Fabiani se retiró del campo “porque había mucho yuyo, la maleza estaba alta” por lo que “no sabe por dónde pasó, aparte que era de noche” y añadió que “a su vez, acá hay algo importante, desde la tranquera de mi representado hay 2.000 metros más y desaparece el rastro del señor Fabiani. Es decir, desaparece en otro campo”.
Respecto a cómo aparece la fuerza policial en el campo de su asistido, el letrado sostuvo: “Al sacarlo mi representado a los gritos, llama enseguida a la Policía y posteriormente como no le contesta la policía llama la brigada la cual cae entre 30 y 45 minutos posteriores”. Panceri reconoce que hasta aquella escena habría coincidencias con la querella. En este sentido precisó que existen hasta ahora “dos teorías o tres teorías que se están manejando que son simplemente hipótesis, es decir no hay nada, no hay ninguna evidencia que las corrobore, todavía hay ninguna evidencia que corrobore y que diga ‘pasó esto’, pero las líneas investigativas están dadas”.
La primera sería que sufrió un problema de salud y falleció. Esta primera hipótesis requiere del hallazgo del cuerpo para que se le realice la autopsia. La segunda consiste en el supuesto de que “lo agarró la policía, lo maltrató y pudo haber tenido un paro cardíaco”. Panceri sostuvo que, respecto del accionar de la fuerza es “muy objetivo porque, lo tengo como experiencia, soy abogado Federación Argentina de Caza y me he encontrado con muchos abusos de la brigada, no de todos, son excepciones que hay como todo, pero en casi todos los casos han abusado de la fuerza y de su poder para secuestrar ilegalmente armas”. En este punto también hay coincidencia con la querella en que no se trata de responsabilizar a toda la fuerza.
La tercer teoría la cual no comparte y que es la de la querella, es que “hay una connivencia con mi representado y las fuerzas de abigeato. Entiendo que no Porque primero hicimos peritar las armas; segundo ¿para qué va llamar por teléfono enseguida?; después, dejó de hacer todas sus actividades laborales prestando ayuda a la familia y a todas las fuerzas policiales y judiciales para que vean que el campo`, que no se pierdan las huellas que existían por casi 30 días. Hau que pensar que perdió de hacer y realizar la cosecha que va a venir y va a tener su fruto en diciembre”.
Consultado respecto a qué pasos va a dar la defensa tras los primeros instantes de la investigación, el letrado precisó que “lo último que fue el ofrecimiento por parte de esta defensa de que sean peritado los teléfonos de mi representado y el de su señora para despejar las sospechas sobre cualquier otro llamado, en qué horario correctamente se hicieron las llamadas, quedaría eso y a su vez, también sé que se peritaron los teléfonos de cuatro oficiales de la de la Brigada Abigeato”. APFDigital