Amarillo explicó que los requisitos para obtenerlo que dio a conocer el gobierno «son tan restrictivos que el universo de beneficiarios se reduce al mínimo».
«Por ejemplo no se puede tener trabajo registrado, ni siquiera como monotributista; no se puede tener jubilaciones ni pensiones; tampoco prestación por desempleo, ni beca progresar, ni asignación por embarazo. Tampoco estar cobrando la asignación por hijo ni ningún programa social», remarcó Amarillo.
«Para colmo cruzarán datos con quienes son propietarios de automotores, motocicletas o inmuebles, como si su sola posesión asegurara que su poseedor tiene una fuente de ingresos para poder subsistir», reflexionó el referente del P.O.
Y agregó que «más grave aún: no podrán cobrarlo quienes estén bancarizados, incluso con billeteras virtuales, que son de amplia circulación en los barrios populares a falta de cuentas ‘formales’ y en el caso de la juventud cruzarán los datos de todo su grupo familiar».
El referente del Frente de Izquierda recordó que se necesitan más de 56 mil pesos para no ser indigente y sin embargo las prestaciones con las cuales se cruza el programa, como el Potenciar Trabajo, son muy inferiores a esa suma. Por lo que si sumamos el Potenciar más este nuevo bono no se llegaría entre los dos a cubrir la necesidad de alimentación de una familia», graficó.
Por último comparó que «el gobierno emitió para pagarle a los sojeros casi 600.000 millones de pesos; pero cuando se trata de la población que no tiene para comer, restringe al mínimo el cobro de manera tal que deja afuera a millones de familias en la indigencia».
«Rechazamos esta nueva burla y seguimos reclamando trabajo genuino, universalización de los programas sociales para los desocupados y un salario mínimo de emergencia acorde a la canasta de pobreza, hoy en 128 mil pesos», finalizó Amarillo.