En este invierno, algunos días pasarán más rápido de lo que imaginamos, marcando una nueva marca en la historia de la Tierra. Durante los próximos meses, en plena temporada invernal en el hemisferio sur, se registrarán jornadas con una duración ligeramente inferior a lo habitual.
Aunque se trate de milisegundos, el hecho ha despertado gran interés en la comunidad científica internacional. De acuerdo con expertos del Servicio Internacional de Rotación Terrestre y Sistemas de Referencia (IERS) y del Observatorio Naval de Estados Unidos (USNO), estas anomalías se deben a una compleja interacción entre factores terrestres, lunares y atmosféricos.
Los días más cortos del siglo: fechas clave
Según Graham Jones, astrofísico vinculado al IERS y al USNO, los días más cortos de este siglo se esperan para el 9 y 22 de julio, así como el 5 de agosto de 2025. Aunque la diferencia será imperceptible para la mayoría de las personas, los registros muestran que en esas fechas el planeta rotará un poco más rápido de lo normal.
Estos serán los acortamientos detectados:
9 de julio: 1,30 milisegundos más corto
22 de julio: 1,38 milisegundos más corto
5 de agosto: 1,50 milisegundos más corto
Aunque parezca insignificante, esta reducción en la duración de los días representa un fenómeno raro que no se había observado con tanta claridad en más de un siglo. Es un recordatorio de que, aunque nos parezca constante, la rotación de la Tierra está en realidad en permanente cambio.
¿Por qué gira más rápido la Tierra?
La aceleración rotacional de la Tierra es un fenómeno complejo que aún no tiene una explicación definitiva. Leonid Zotov, investigador de la Universidad Estatal de Moscú especializado en rotación terrestre, explicó que “la causa de esta aceleración no se explica del todo”, aunque hay varias teorías que buscan dar respuesta.
Entre los principales factores que podrían estar contribuyendo al fenómeno se encuentran:
-La posición de la Luna: cuando nuestro satélite natural se sitúa más al norte o sur del ecuador, su fuerza gravitacional puede alterar sutilmente la velocidad de rotación del planeta.
-El núcleo terrestre: el movimiento del hierro líquido en el interior de la Tierra, que genera su campo magnético, también podría estar influyendo. Cambios en estas dinámicas pueden modificar, aunque sea mínimamente, la rotación.
-Corrientes oceánicas y cambios atmosféricos: la interacción entre los océanos, la atmósfera y la superficie terrestre genera una fricción que puede influir en la duración del día. Eventos como El Niño o variaciones en los vientos de gran altitud pueden tener un efecto acumulativo.