En el marco de las políticas promovidas por el gobierno nacional de Javier Milei en la Ley Bases, Entre Ríos dio el último paso para poner en marcha el Rigi en la provincia, más allá del rechazo de la oposición y la fuerte resistencia de organizaciones sociales, ambientales y sindicales.
Cabe recordar que el Rigi, creado en la Ley de Bases y puntos de partida para la libertad de los argentinos, «establece diversos incentivos fiscales para atraer grandes inversiones al país, otorgándoles un marco de seguridad jurídica y estabilidad», mediante el que se prevén distintos beneficios, entre los que destacan los incentivos fiscales, aduaneros y cambiarios durante treinta años, «con la finalidad de desarrollar y fortalecer la competitividad de ciertos sectores económicos, incrementar las exportaciones de mercaderías y servicios al exterior, generar empleo, entre otros fines significativos».
Además, en sintonía con la Nación, el gobierno de Frigerio creó el Rini, que determina «el marco regulatorio adecuado mediante el cual se fomente y facilite la atracción de nuevas inversiones hacia la provincia, reconociendo los beneficios estratégicos que tales inversiones pueden aportar». Los principales objetivos del Rini «tienen que ver con el fomento del desarrollo integral y armónico de la economía provincial, lo que generará un adecuado impulso del desarrollo económico y el fortalecimiento de la competitividad regional». Fuente: AIM Digital
