En diálogo con LT11, Mario Arcusin, el abogado querellante en la causa por la muerte de cuatro jóvenes en la ruta 39, que tiene como acusado a Juan Orrico, brindó precisiones sobre el caso, luego de que este lunes la jueza Melisa Ríos dictara que el ex funcionario deberá fijar domicilio en Herrera, en donde tendrá que vivir al cuidado de otra persona.
En este sentido, Arcusin afirmó que «Orrico debería estar en prisión y debo entender que hay una Justicia para ricos y una para pobres. Esto es desparejo».
Y agregó: «Pedí que se revoque la sentencia del Juez de Garantías que consistía en permitirle seguir en Escobar con la obligación de presentarse en 15 días en la comisaría más cercana para probar su residencia, lo que me parece ilógico, porque la policía debería ir a la casa a constatar que se encuentra allí. No sabemos si esa dirección existe y, en cambio, se hicieron tres evaluaciones socioambientales de las familias de las víctimas fatales del accidente».
«Otra cuestión es que Orrico no podía manejar autos y se envió un oficio a la Dirección de Tránsito de Entre Ríos ignorando que Escobar está en provincia de Buenos Aires. El último punto es la prohibición de salida del país. Esto apelé e insistí en que pedí la prisión preventiva pero obviamente la defensa se opuso, aunque aceptó la domiciliaria incluso en el departamento Uruguay», sostuvo.
«El problema estuvo en la postura del fiscal, con quien yo tengo un aprecio personal pero acá estamos en una postura en la que tenemos que juzgar. La jueza, con un total desempeño de su función, lo puso en un aprieto en varias oportunidades exigiéndole que se definiera en cuanto a si estaba a favor de la prisión preventiva, que ya se había dicho en el Juzgado de Garantías y no notificó ahora. Además le preguntó cuál sería la pena que recibiría cuando yo dije 6 años, si no cambio la carátula y voy a homicidio simple. Pese a las constantes reiteraciones, nunca aclaró cuál sería la pena, que en este caso es muy importante. El fiscal no me acompañó y no entiendo por qué», explicó.
Asimismo, Arcusin hizo una comparación e indicó: «En casos similares, incluso con un muerto y no cuatro, se los ha agarrado del pantalón y se los llevó a la comisaría inmediatamente y en este caso hay una persona que está gozando de una libertad absoluta y recién ahora tiene una serie de limitaciones como el cuidado a cargo de una persona, Orrico designó a su madre, y pedidos especiales cuando tenga que salir».
