Una pareja conocida transitaba por la zona cuando se encontraron con los nuevos reductores de velocidad. Lamentablemente, debido a su mal posicionamiento, las cubiertas del auto se rajaron, dejándolas inutilizables y ocasionando un importante gasto para reemplazarlas.
«Nos sorprendió encontrarnos con estos reductores de velocidad mal colocados. No tuvimos tiempo de reaccionar y nuestras cubiertas sufrieron daños significativos. Es realmente frustrante, ya que acabamos de adquirir cubiertas nuevas».
Este incidente ha generado preocupación entre los residentes de la zona, quienes exigen una pronta solución por parte de las autoridades correspondientes. Los reductores de velocidad deben ser instalados de manera adecuada para garantizar la seguridad vial y evitar daños a los vehículos que transitan por la zona.