El tratamiento de la Emergencia Alimentaria sigue siendo insuficiente para responder a la creciente demanda de comida en los sectores más vulnerables de la provincia de Entre Ríos, considerando que -según un estudio de la UCA- la pobreza en Argentina ascendió al 55,5% y la indigencia al 17,5%.
Esta realidad fue analizada en la reunión que se llevó a cabo el martes 20 en la ciudad de Paraná con la participación de quienes conforman la Mesa de Diálogo Social, en el marco de la Ley 11.140. Con la presencia del Secretario de Articulación de Políticas Sociales Ricardo Vales junto a otros funcionarios del área, los legisladores Lena, Strata, Sanzberro y Otaegui, representantes de la Universidades, de los movimientos sociales MTE, UTEP y de Cáritas de la Arquidiócesis de Paraná, se analizó la escasez de ayuda alimentaria de la que se dispone.
Del informe presentado pudo conocerse que desde Nación se envió a Entre Ríos 56.000 litros de aceite, 60.000 unidades de puré de tomates y 300.000 paquetes de arroz, los que ya fueron entregados a escuelas de algunos Departamentos.
Por su parte, el gobierno provincial destinó un total de 27.000 módulos alimentarios para los 17 departamentos entrerrianos.
«Esos datos claramente reflejan la insuficiencia de los recursos para responder ante la necesidad de los sectores más vulnerables», sentenciaron desde el espacio.
Asimismo informaron que «en el Departamento Uruguay se contabilizan 6.598 raciones alimentarias en los 38 comedores comunitarios y 53 comedores escolares relevados por la administración provincial. Sin embargo, según datos de la Secretaría Municipal de Desarrollo Social, hasta la fecha no se ha recibido ninguno de esos módulos alimentarios para ser distribuidos en ciudad».
En representación de la Mesa contra el Hambre de Concepción del Uruguay participó Carolina Aguiar, dirigente de la CTA Autónoma, quien solicitó que se consideren las realidades de cada localidad entrerriana, considerando que lo asignado para este Departamento no alcanza a cubrir ni el 50% de la demanda de comida. Teniendo en cuenta también que muchas de las organizaciones sociales que asisten con viandas y meriendas a los niños y adultos mayores ni siquiera reciben la tarjeta alimentaria. Al respecto, se acordó un posterior encuentro territorial para coordinar acciones entre la provincia, la municipalidad y la Mesa contra el Hambre local que cuenta con la representatividad de Cáritas diocesana, Iglesias Evangélicas, organizaciones sociales y sindicales. Desde Concepción del Uruguay se destacó que la articulación con funcionarios municipales se ha dado a través del diálogo fluido con las organizaciones sociales por lo que buscará, en forma conjunta, diseñar estrategias para acompañar a quienes hoy sufren la falta de un plato de comida en su mesa.
«Por ello se espera que los frutos de este diálogo pueda replicarse a nivel provincial, observando que los datos son contundentes y que las respuestas también deben serlo. Si la ayuda se detalla pero no se envía, el hambre sigue aumentando», concluyeron.