Un pasacalles con una peculiar frase apareció colgado en la intersección de Sarmiento y Juan Perón. En él se puede leer «Como el primer día, más que en el relevo de las cosas idas, en la expectativa de los logros nuevos, vive el alma mía, en seguir creyendo te sigo querieeeeeeennnnnddoooooooo!!».
Si bien se desconoce quién lo colgó y a quién fue dirigido, lo cierto es que puede tratarse perfectamente de una persona enamorada.
Sin embargo, ¿de dónde proviene esta frase?
Ante este alegre gesto, la única certeza es que se trata de las primeras frases de la canción «Como el primer día» de Alberto Cortez, escrita en 1983.
La letra
Te sigo queriendo, como el primer día,
con esta alegría con que voy viviendo;
mas que en el relevo, de las cosas idas
en la expectativa de los logros nuevos.
Como el primer día, de un sentir primero,
como el alfarero de mis fantasías,
con la algarabía de un tamborilero;
y el gemir austero de una letanía,
como el primer día te sigo queriendo.
Te sigo queriendo valga la osadía,
con la garantía de mis pobres sueños,
es decir empeños, por que todavía
vive el alma mía de seguir creyendo
Como el primer día, como el primer beso
y el primer exceso de melancolía,
como la afolia del primer intento,
como el argumento, de una profecía
como el primer dic, te sigo queriendo.
Te sigo queriendo, si no lo diría,
se que no podría con mis sentimientos
lo que llevo adentro se convertiría
en una jauría de remordimientos.
Como el primer día, eres el velero,
la estrella, y el viento
de mi travesía.
Mi filosofía, mi apasionamiento
mi mejor acento, mi soberanía
como el primer día te sigo queriendo.