En diálogo con La Pirámide, Mario Arcusin, el abogado querellante de tres de los cuatro jóvenes que fallecieron en el accidente fatal en la Ruta 39 el pasado 20 de junio, hecho que involucró al funcionario público Juan Orrico, brindó detalles sobre el estado de la causa.
En primer lugar indicó que la prueba de alcoholemia al funcionario «se hizo y dio más de 1.1 y con ese resultado ya es agravante» y enfatizó que se trata de una cuestión que tiene «pena de cumplimiento efectivo».
Asimismo, baraja la posibilidad de encuadrarlo en homicidio simple «como fue en un caso hace 10 años en Paraná, donde atropellaron a un niño que salía de la escuela y pretendían ponerlo como homicidio culposo y la querella lo puso con dolo. En este caso existe antecedente y fallo del Superior Tribunal, aunque haya ocurrido en otra ciudad, fue con exceso de velocidad y con alcohol en sangre», detalló.
«Además se utilizó un auto oficial sin permiso oficial, manejado por una persona que no lo debía manejar porque supuestamente tiene que tener un chofer con un seguro que no se va a hacer cargo por el nivel de alcohol», remarcó.
Por otro lado, anticipó: «Hay un montón de cosas que pesan. Mañana voy a hablar con el fiscal y ver qué pasa. Orrico está citado a las 10. Mandaron una historia clínica que la estaba analizando el Dr. Siemens».
Y especificó: «Se pidieron las cámaras de la rotonda de la segunda y de San Justo para ver unos 20 minutos antes, que hay un rango para ver si salió por uno de esos dos lugares y cómo iba: rápido, zigzagueando».
«Hay cuatro chicos muertos y parece que hay gente a la que ni le molestó», cerró Arcusin.